Reindeerspotting

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Reindeerspotting, titulado en referencia a la película inolvidable de Danny Boyle, es un documental sobre un grupo de junkies filmado por uno de ellos cuya salida en su país de origen dio lugar a una polémica sin precedentes. Antes de ser presentado en el MOMA de Nueva York, el film será proyectado en París, en el marco del festival Filmer la musique.

El realizador Joonas Neuvonen, quien milita también en favor de la legalización de las drogas duras, hizo la película en distintas partes de Europa. Luego de haber sufrido varios contratiempos:  material robado, otro secuestrado por la policía y el fallecimiento de su amigo (protagonista principal de la película), el joven cineasta salió herido de la experiencia de Reindeerspotting. Sin embargo, está convencido de que su documental contribuyó a “cambiar algunas mentes” sobre el uso de drogas duras y su consumo.

Fotógrafo de formación, inspirado por el Gonzo y las películas de su compatriota Rami Mollberg (Neuvonen lanzó el proyecto Reindeerspotting en 2003 con el objetivo de salir de Rovaniemi). En esta pequeña cuidad del norte de Finlandia, el realizador tenía, en esa época, 26 años y “poca plata y poca educación” se drogaba con Subutex (un sustituto de la heroína) y vendía hash a algunos adolescentes.

Al principio quería hacer una serie de fotos en blanco y negro de la subcultura a la cual pertenecía, y que las autoridades trataban de esconder. Pasó que me enganché con el cine experimental y el videoarte. Entonces decidí grabar un documental que sería una suerte de auto-ficción” confiesa el realizador.

Con una vieja cámara de video, Joonas Neuvonen empezó a filmar a ocupas de Rovaniemi donde vivían sus amigos, todos adictos al Subutex que compraban con el dinero de robos. Pronto el proyecto pasa a ser el retrato de su amigo Jani, el más joven del grupo y el caso más grave: “sacó 5.000 € del robo de una tienda y fuimos a Europa a buscar droga”. El viaje lleva a los dos amigos hasta Paris, Copenhague y Barcelona, donde la cámara de Neuvonen captura todo: las inyecciones, las bajadas y las dudas de Jani. “Un rodaje extenuante” explica el realizador, quien tuvo que lidiar con sus propias adicciones, la inestabilidad de su amigo (detenido varias veces) y la policía que los perseguía. “Tenía que esconder mis cosas para que no las encuentre la policía. Una vez me confiscaron la cámara porque pensaban que era robada. No encontraron nada ilegal pero igual borraron ciertas secuencias”.

Los verdaderos problemas empezaron después del rodaje, a la hora del montaje, cuando Neuvonen tuvo que editar cientos de horas de grabación y luego, al momento de encontrar un distribuidor para defender su proyecto titulado Reindeerspotting – Escape From Santaland.

El documental saldrá 7 años más tarde en Finlandia. “Había gente a favor y otra en contra de Reindeerspotting” recuerda el realizador cuyo discurso sobre la droga es muy claro: “La ilegalidad solo trae una vida más miserable para los adictos. Quería ver esfuerzos en favor de la legalización o la despenalización, como pasa en Portugal; que la gente deje de ver las drogas solo como una maldición. Es bastante fácil ignorar el placer y la inspiración que ofrecieron al hombre”.

Distribuido en muchas salas, la película pasó a ser el éxito más grande  que conoció un documental Finlandés en términos de entradas y un objeto de culto en el internet donde circula libremente hace unos meses. El éxito no beneficio a Jani, a quien encontraron colgado el 7 de julio del año pasado en Phnom Penh, a donde había ido por un viaje de 2 meses con el realizador.